Compartimos una tarde inolvidable con los chicos de los hogares Sueños de Amor y Madre Teresa de Calcuta. Fue una jornada llena de risas, juegos y mucho amor.
Nuestra misión fue regalarles una tarde mágica. Disfrutamos juntos de un festín con panchos, sanguchitos, pizzetas y golosinas para todos. La alegría se desbordó con maquillaje artístico, actividades divertidas y personajes que hicieron reír y soñar a los más pequeños.
Pero el momento más especial fue cuando compartimos un mensaje de esperanza, recordándoles que cada uno de ellos es un tesoro único, amado por Jesús y lleno de propósito. Ver sus sonrisas nos llenó el corazón y nos recordó por qué hacemos lo que hacemos.
